Una parte de los talleres se dirigen a la conciencia, porque hay contenidos importantes que conocer; otra parte se dirige a nuestro yo inconsciente, porque es allí donde acabaremos efectuando los cambios decisivos que afectarán nuestra vida; y la última parte contacta con la supraconsciencia, porqué nos es imprescindible contactar con nuestra propia Divinidad.

Los cursos son básicamente vivenciales.

Invitamos a los alumnos a experimentar en sí mismos si sienten como propia la información recibida a través de actividades paralelas pensadas exclusivamente para este fin.

En los cursos de crecimiento personal, nunca se obliga a nadie a hacer nada. Y tampoco hay que temer quedar en evidencia ante nadie. TÀLEM es extremadamente respetuoso con la voluntad de todos.